El suelo tiene vida y ella se mantiene gracias al equilibrio de los diferentes organismos que lo componen, de esta manera no todas las plantas requieren de los mismos nutrientes de la tierra e incluso algunas pueden servir para proteger a otras atrayendo insectos que de otra manera pondrían en peligro su supervivencia. Así mismo, los animales y vegetales muertos ayudan aumentando la fertilidad del suelo, en resumen el ciclo de la vida ocurriendo debajo de nuestros pies. Pero ¿Cómo impacta el monocultivo este microsistema del que nos beneficiamos?
El monocultivo es la antítesis de lo descrito previamente, este término se refiere a las plantaciones de una sola especie vegetal en una gran extensión de tierra rompiendo el equilibrio, por ejemplo árboles como el eucalipto o el pino para luego convertirlos en papel o los alimentos como la soja que se usa para hacer rendir una gran cantidad de alimentos procesados con el argumento de alimentar a toda la humanidad, de allí la gran relación entre este subtipo de cultivo y la exportación. Pero para entender el impacto de ellos primero debemos definir algunos conceptos.
El suelo es una capa de muy lenta formación, un centímetro de profundidad puede tardar hasta 1000 años en generarse y esa formación depende principal pero no exclusivamente de dos procesos que ocurren permanentemente:
Desglosemos los diferentes integrantes del suelo:
Los minerales provienen de la roca descompuesta aunque el viento y el agua también pueden traerlos de otros lugares, habitualmente de terreno erosionado.
De su proporción depende que los suelos sean muy compactos generando más dificultad para el crecimiento de las raíces, o muy porosos lo que hace que sea más difícil conservar la humedad, un suelo sin agua es un suelo sin vida, un suelo con demasiada agua desplaza al aire disminuyendo la proporción de oxígeno y de nitrógeno, este último importante para que las plantas aprovechen el suelo gracias a su transformación por parte de las bacterias.
Es el producto de animales o vegetales en proceso de descomposición, también posee alto contenido en minerales. Entre los microorganismos podríamos destacar a los insectos (despedazan materia orgánica) y las bacterias y hongos (Liberan nutrientes) todos son importantes para degradar la roca y para que las plantas aprovechen los nutrientes que aporta la materia orgánica, además generan cámaras de aire que permiten el almacenaje de agua y el crecimiento de las raíces.
Una hectárea de tierra puede contener más de 300 millones de insectos y otros pequeños animales y esa cifra se hace inimaginable si nos centráramos en las bacterias (Hasta 1 millón en una cucharada de tierra) todos estos organismos individualmente son importantes pero es en la interacción armónica, oportuna y equilibrada en donde está la clave para la formación de Humus, la capa que más sirve para retener agua y nutrientes y la que mayormente previene la erosión, haciendo la diferencia entre un terreno viable o no.
En resumen podríamos considerar un terreno como fértil si:
Aquí una gráfica de suelos naturalmente cubiertos de vegetación, es la mejor forma de conservar la fertilidad: Las raíces estabilizan la tierra, los árboles más altos disminuyen el impacto del viento y la lluvia. Las hojas que caen de las plantas, y los animales muertos forman el humus el cual enriquece el suelo y mejora las condiciones del suelo para el crecimiento de las raíces y la disponibilidad de agua y aire, absorbe la humedad impidiendo que el agua se escurra y provoque arrastre de tierra.
La sombra de los árboles favorece el desarrollo de plantas como los helechos, las orquídeas, musgos y líquenes, los cuales no pueden crecer con la exposición directa al sol. Esta más amplia gama de vegetales atrae a un muy diverso número de insectos y aves que a su vez ayudarán a la polinización y la diseminación de semillas.
Partimos de la base de que casi cualquier terreno cultivado está más expuesto a la pérdida de suelo y al gasto lento de sus nutrientes ya que hay una menor oposición al arrastre por agua y viento, si además se hace en pendiente, como el aguacate, la erosión es más notoria. Como el uso del suelo es prácticamente exclusivo para alimentación las plantas que crecen no cumplen ningún ciclo, por lo que no regresa al suelo para enriquecerlo y mantener el equilibrio conservando la vida de los organismos que lo componen, de tal forma que si no buscamos formas de conservar esta simbiosis con el paso de los años la fertilidad del suelo se acaba, una de las medidas es la incorporación de abono y materia orgánica.
No podemos desconocer que el hambre, la desnutrición, el aumento de la población mundial son en sí un reto para la industria de los alimentos representada en los agricultores y métodos tradicionales y modernos de cultivo, resumamos los efectos de los monocultivos en este frágil ecosistema:
Hasta aquí las razones que pueden afectar tu salud DIRECTAMENTE: disponibilidad de alimentos, calidad nutricional de los mismos, riqueza de la microbiota intestinal cuya integridad está cada vez más relacionada a una mejor salud física y mental y a una menor probabilidad de adquirir enfermedades. Pero hay otras INDIRECTAS que hay que tener en cuenta: Los monocultivos hacen que el empleo en las zonas donde se realiza también sea puntual, mayor en la temporada de cosecha o siembra y prácticamente nulo el resto del año, poniendo en riesgo la estabilidad económica regional, el bajo nivel socioeconómico está relacionado con la aparición de un gran número de enfermedades; Pérdida de culturas y desplazamiento de habitantes tradicionales, que habitualmente pasarán a formar parte de cinturones de pobreza en grandes urbes. Deterioro del paisaje, ¿te acuerdas del baño de bosque? pues es imposible hacer shinrin yoku en monocultivos. La salud es algo que depende de lo físico, lo mental pero también del bienestar económico, social y ambiental, entre otras cosas, cuidemos mucho lo que elegimos para llevar a nuestro plato, de ello depende que tú, los que te rodean e incluso aquellos a los que nunca vas a conocer tengan una mayor probabilidad de estar bien. Ve a los pequeños agricultores o a aquellas agrupaciones encargadas de contactarlos con las ciudades, si te interesa esa información déjalo en los comentarios y haremos una entrada dedicada a ello.
Diego Rincón Cruz
BIBLIOGRAFÍA
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